Hoy salí a la calle por primera vez
Por Lucía Panno*
Hoy salí a la calle por primera vez
me tomé el subte
alguna gente me pareció estúpida
maleducada
muy chetos
algunas chicas me parecieron muy lindas
algunos peinados muy raros
como el de flequillo fucsia
le compré una cañita con plumas al gato
para que no esté celoso de la bebé
bebé bebé
mientras el papá hace jardinería
y yo estoy en la calle
ella duerme en su cunita
¿está mal que haya salido un rato?
¿es muy pronto?
solo fui a buscar una pequeña estatuilla de kuan yin
la madre maría china
para poner en mi altarcito de las madres
a un lugar que al final me pareció muy cheto
un lugar que vende la moda del amor
yo me quería comprar un poquito
pero estaba muy caro.
y además me di cuenta de que no lo necesito
por eso me fui en silencio y rápido
y no me hice cargo de la mirada distante de la dueña
rubia y envuelta en collares mágicos
yo pensaba que la gente mística era amable por naturaleza
receptiva
porque ellos enseñan eso, no?
a recibir, a soltar, todo eso.
pero en fin, no importa
después seguí mirando la galería
quise comprar un cuaderno
no encontré el correcto
me encuentran los cuadernos correctos
y no pasó
pensé en dibujos
en la fábrica de belleza
la avenida santa fé
las modelos del 2000 todavía
en los afiches de mallas del verano
que empieza hoy.
qué chiquitas son, qué perfectas
yo en serio, no es un discurso dove
pero estoy más linda que antes
no comparto eso de que después del parto te sentís fea
es decir: me siento mal
lloro todo el día
tengo miedo de que mi hija no me quiera
de hacer las cosas mal
pienso en volver a la psicóloga
para buscar las palabras sobre las que pisar
en este abismo enorme que se abrió ante mí
tengo sueño y fastidio
pero linda estoy
y veo a las otras mujeres
las que caminan por la calle
y me alegra estar por fin estar del lado de las madres
gracias, mamá
gracias mamás de mi gente querida
gracias hijita
ahora somos parte de una hilera de mamushkas
gracias a mí.
*Lucía Panno nació en Buenos Aires, cerca del Parque Lezama. Cuando era bebé, su papá la llevaba al Bar Británico a leer el diario y tomar café. Fue una niña actriz y una poeta adolescente. De grande se dedicó a la dramaturgia. Escribió y dirigió sus propias obras de teatro ¡toda una proeza! Coordina talleres de escritura y creatividad. Cuando nació su hija Cata, la poesía volvió. También volvieron los barcitos.
**Collage maravilloso por Esperanza Bacigalup Vertiz.
**** Este texto forma parte de los encuentros de El silencio de las madres.