Por Giuliana Trucco*
19 enero
Hoy estoy profundamente triste.
Necesito que alguien cuelgue la ropa limpia, lave los platos, me traiga comida, me diga que todo esto eventualmente dejará de doler.
20 enero
Sangrar y reposar. En ese orden. Expulsarlo. Revisar que se haya curado. Volver a la normalidad.
En todos lados decían que esto podía pasar pero nos creímos invencibles.
21 enero
También se me murió una planta de un año. Se llenó de arañas que la mataron por dentro. No hubo nada que se pueda hacer.
Lo peor ya pasó.
Ahora me emociono con todo lo que son animales y plantas. Ayer a la salida del hospital alimentamos a unos gorriones que estaban en la plaza.
No se equivocaban cuando decían «contáselo primero a las personas que quieras tener cerca si llega a salir algo mal».
Salió mal.
El sábado pasado a esta hora habíamos salido a caminar y merendar y fui profundamente feliz. Extraño eso, todo se destruyó demasiado rápido.
22 enero
Construiría una máquina que me abra por la mitad y me extirpe todo el dolor.
24 enero
Hoy por fin llegó el día tan esperado. Tuve terapia. Hice llorar a la psicóloga.
Me dijo que no hay nada, ni siquiera alguna explicación científica, que pueda disminuir este dolor. Sólo el tiempo y la aceptación.
Eventualmente todo esto será solo un recuerdo.
25 enero
Hoy fue un día de mucha sanación.
26 enero
Durante el día estoy bien y me hago la superada, la que acepté todo y la que confía en el futuro, pero a la noche me caigo otra vez.
Ya pasó una semana.
Quizás ese era el objetivo: despertarme.
30 enero
Confieso que extraño un poco la serie de excusas infalibles con todo lo del embarazo que me había armado y que ahora ya no puedo usar.
31 enero
A veces estoy enojada y desganada pero en realidad solo estoy muy triste. Hoy fue así.
Este enero siento que crecí 15 años de un solo golpe.
Todos los problemas que tenía antes me parecen tan chiquititos e insignificantes.
3 febrero
Hoy mi mamá me preguntó si estaba triste por lo del bebé, le dije que sí, y me respondió que hay que ponerle pilas a la vida y seguir adelante.
4 febrero
Hoy me sentí en paz.
5 febrero
Hoy le dije a mi novio que no podemos pasarnos toda la vida llorando y que hay que aprender a convivir con el dolor. No sé quién me creo que soy.
6 febrero
Hoy tengo que hacerme una ecografía para ver si los órganos ya retomaron su tamaño normal y para confirmar que efectivamente esté bien vacía.
Ganas de vivir hoy: 0
7 febrero
Me hice los estudios, salieron bien, no lloré en el consultorio, llegué a casa y me hice un nesquik bien frío. Ahora mis victorias diarias son así.
14 marzo
En las horas que pasé en el shockroom de la Bazterrica tuve un pensamiento recurrente: la vida es muy hermosa y yo la estoy dejando pasar.
La enfermera me decía q tengo un cabello hermoso y finito como mis venas, tan finitas que debía usar una aguja de niños para pasarme el suero.
Yo estoy anotando todo esto porque lo quiero recordar, porque me olvido fácil de las cosas. Pero de toda esta mierda quiero sacar algo bueno. Ojalá nadie me lea.
Me cuesta un poco visualizarlo ahora, con lo que fueron estos últimos meses, pero estoy convencida de que todo va a pasar.
16 marzo
Hoy la ginecóloga me dio el alta definitiva y me dijo que estoy lista para continuar mi vida como lo desee.
*Giuliana Trucco nació en Río Gallegos, Santa Cruz, en 1991. Vive y trabaja en Buenos Aires desde el año 2010. Fotógrafa y Licenciada en artes audiovisuales (Universidad Nacional de las Artes.), se desempeña en tareas de gestión cultural orientadas al rubro audiovisual. Mamá de Lina.
**Collage maravilloso de Esperanza Bacigalup Vértiz